| Capítulo de MMVIII. Encomienda Templaria y Hospitalaria. Castres (Francia). 1ª parte
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| Capítulo de MMVIII. Encomienda Templaria y Hospitalaria. Castres (Francia). 2ª parte
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| Capítulo de MMVIII. Encomienda Templaria y Hospitalaria. Castres (Francia). 3ª parte
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Capítulo de MMVIII. Encomienda Templaria y Hospitalaria. Castres (Francia). 4ª parte
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Aragón Misterioso. (Aragón TV) 9-2-2008. El pinar de Tévar. Varios grupos de la Federación colaboraron en el rodaje de la recreación de la batalla del Pinar de Tévar, entre los ejércitos de Rodrigo Díaz de Vivar -el Cid Campeador- y Ramón Berenguer II. Según la leyenda, todavía hoy pueden oirse los gritos y sonidos de la cruenta batalla que tuvo lugar en el Pinar de Tévar.
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Aragón Misterioso. (Aragón TV) 29-3-2008. La campana de Huesca. En este capítulo en el que colaboran los grupos de la Federación se recrea la leyenda de la Campana de Huesca. Según cuenta,estando Ramiro II El Monje preocupado por la desobediencia de sus nobles mandó un mensajero a su antiguo maestro, el abad de San Ponce de Tomeras, pidiéndole consejo. Este llevó al mensajero al huerto y cortó unas coles, aquellas que sobresalían más. A continuación ordenó al mensajero repetir al rey el gesto que había visto. Ramiro II hizo llamar a los principales nobles para que vinieran a Huesca, con la excusa de hacer una campana que se oyera en todo el reino. Una vez allí, hizo cortar la cabeza a los nobles más culpables, sofocando la revuelta. Una vez muertos, los colocó en círculo y al obispo de Huesca, el más rebelde, lo colocó en el centro como badajo. Luego dejó entrar a los demás para que escarmentaran.
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Aragón Misterioso. (Aragón TV) 5-4-2008. Los Corporales de Daroca. Según la tradición, un sacerdote se disponía a administrar la Comunión a unos guerreros, cuando los árabes atacaron repentinamente el campamento de los ejércitos cristianos, situado cerca del castillo de Codol. Para evitar la profanación, el celebrante guardó precipitadamente las Sagradas Formas envolviéndolas en los corporales que había sobre el altar. Cuando, pasado el peligro, fue a ponerlas en el Sagrario, las Hostias consagradas habían sangrado y se habían adherido, por la propia sangre, al paño que las contenía. Seguros de que había sido un milagro, los cristianos se lanzaron contra los moros y los vencieron
Tras la victoria, las ciudades de Teruel, Calatayud y Daroca se sortearon los Corporales, quedándose en esta última ciudad.
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