Bataneros
(Fullones) |
Año de fundación: 2006
|
Clave en el proceso de
elaboración de los tejidos era el abatanado, cuyo objetivo era transformar
tejidos abiertos en otros más tupidos.
Los batanes funcionaban por la fuerza de una corriente de agua que movía una rueda hidráulica, encargada de activar los mazos que golpeaban los tejidos hasta compactarlos.
Una vez abatanados los paños, eran golpeados con una pala de madera sobre una losa de piedra para quitarles las arrugas.
A continuación se ponían a secar y se le devolvían al tejedor. El Fuero regulaba al detalle la explotación de los batanes o molinos traperos, intentando evitar cualquier monopolio a la hora de alquilarlos. Así, se ordenaba a los bataneros tratar los tejidos por riguroso orden de entrega.
Eran castigados con cuantiosas multas aquellos que relegaran unos productos en favor de otros. También el ordenamiento foral prohibía utilizar instrumentos de hierro para evitar posibles rasgaduras. Por cada tela teñida, tejida y tundida debían cobrar tres sueldos, estando las telas estandarizadas.
Los batanes funcionaban por la fuerza de una corriente de agua que movía una rueda hidráulica, encargada de activar los mazos que golpeaban los tejidos hasta compactarlos.
Una vez abatanados los paños, eran golpeados con una pala de madera sobre una losa de piedra para quitarles las arrugas.
A continuación se ponían a secar y se le devolvían al tejedor. El Fuero regulaba al detalle la explotación de los batanes o molinos traperos, intentando evitar cualquier monopolio a la hora de alquilarlos. Así, se ordenaba a los bataneros tratar los tejidos por riguroso orden de entrega.
Eran castigados con cuantiosas multas aquellos que relegaran unos productos en favor de otros. También el ordenamiento foral prohibía utilizar instrumentos de hierro para evitar posibles rasgaduras. Por cada tela teñida, tejida y tundida debían cobrar tres sueldos, estando las telas estandarizadas.
Premio Defensor de Tirwal 2009
Mejor Haima y Ambientación |
Ubicación haima: Plaza San Juan |